Como respuesta al alza en los cierres de colegios privados y escuelas públicas del país y la toma de decisiones que tienen los padres durante el receso de verano, la Dra. Yolyhalmarie Hernández, experta en neurociencia y teo-terapia familiar sistémica, compartió información sobre cómo los padres pueden preparar a sus hijos para los cambios y hacer una transferencia de escuelas saludable.
“Ante este escenario de cambios en las que las familias puertorriqueñas se están enfrentando con el cierre de colegios privados y de escuelas públicas, hasta otras veces por decisiones propias, es necesario trabajar los sentimientos que los niños y adolescentes pueden enfrentar por estas decisiones”, mencionó la Dra. Hernández.
“Lo más importante es validar lo que los niños sienten, escuchar y poder provocar conversaciones en relación a esos sentimientos. Muchas veces los niños no van a saber explicar o no van a querer hablar sobre el tema, pero hay que provocar esas conversaciones para identificar cómo se sienten ante los cambios”, añadió.
Según información entre agosto 2012 a mayo 2021 se cerraron cerca de 700 escuelas públicas en el país. De igual manera, desde el 2019 hasta 2023 más de 50 instituciones de educación privada de kínder a duodécimo grado han tramitado el cierre de operaciones.
Proyecciones de expertos aseguran que durante los próximos años continuará el cierre de escuelas públicas y colegios privados, obligando a los padres a mover a sus hijos de institución.
“Esto es un escenario que todos los padres debemos tener presente, velando por la importancia de lograr una transferencia de escuela saludable para nuestros niños. Para lograrlo es importante establecer una rutina, explicándole los horarios y las actividades que van a suceder. Además, hay que hacer que se sientan incluidos en este tipo de decisiones. Los niños no toman decisiones, pero deben tener voz en ese proceso de cambios”, explicó la también empresaria, educadora, directora escolar y conferencista.
La Dra. Hernández explicó que cuando se hacen estos cambios, los niños están manejando una pérdida y necesitan un proceso de apoyo. Mencionó también que se debe tener presente que el tiempo de adaptación no es igual para todos y como padres se debe observar los cambios en comportamiento.
“Si ese proceso de adaptación se está complicando, es necesario integrar al terapeuta, trabajador social, director o algún otro recurso de apoyo dentro de la nueva institución. En este proceso es importante la colaboración para que el niño pueda sentirse seguro”, sostuvo.
Entre los indicadores a los que los padres deben estar pendiente, la experta, que también completó una certificación en Primeros Auxilios de Salud Mental Juvenil con la Fundación Americana para la Prevención del Suicidio, contó que se debe observar el estado de ánimo de los niños o jóvenes, cambios en la alimentación o si aparecen algunos dolores que muchas veces desaparecen al llegar al hogar.
La Dra. Hernández también mencionó que, “los cambios no pueden evitarse, pero como padres los ayudamos en ese proceso. Es necesario mantener una actitud positiva frente a los niños, dominar las rutinas y en esos momentos que puedan tener una crisis traerlos al presente. También, pueden utilizar algún objeto de adaptación o de transición con el que los niños se sientan seguros y evitar mostrarnos ansiosos o enfadados”.
“Finalmente, no se deben ofrecer recompensas, sino al final del día reforzar su adaptación. No se recomienda asomarse por la ventana cuando ya el niño está calmándose y lo más importante, nunca irse sin darle un beso. No podemos evitar estos procesos de duelo en los cambios, pero sí es nuestra responsabilidad acompañarlos”, culminó.
Los interesados en conocer más información pueden ir a las redes sociales de la Dra. Hernández en Instagram como @dra.yolyhalmarie y en Facebook: Dra. Yolyhalmarie Hernández.