CARACAS (AP) — El Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela informó el sábado que, una vez culminada la fase de recolección material probatorio, se inicia el peritaje formal a los resultados electorales de los comicios presidenciales del 28 de julio, solicitado por el presidente Nicolás Maduro, un recurso que ha sido cuestionado por observadores extranjeros que dudan de la independencia del organismo.
La presidenta del tribunal, Caryslia Rodríguez, anunció en una rueda de prensa que tras la comparecencia de los actores convocados y “recolectados los instrumentos electorales”, los magistrados de la sala electoral “se abocan al peritaje de todo el material electoral de valor probatorio consignado en físico y/o digital”.
El Tribunal Supremo tramita un recurso contencioso electoral presentado por Maduro sobre los resultados oficiales que son cuestionados por la oposición, que sostiene que triunfó el candidato unitario, Edmundo González Urrutia, mientras el oficialismo acusa a la coalición de querer desconocer su victoria decretada por la autoridad electoral.
Aunque en esta ocasión Rodríguez no mencionó el tiempo que llevará la etapa de evaluación, el 5 de agosto dijo que la sala “inicia peritaje del material consignado por un lapso de hasta 15 días prorrogables”. La sentencia que se emita tendrá carácter de cosa juzgada y ser inapelable y de “obligatorio acatamiento”, señaló.
El Centro Carter, que fue invitado por el organismo electoral venezolano a observar los comicios del 28 de julio en los que el Consejo Nacional Electoral proclamó ganador a Maduro, había cuestionado la independencia del eventual análisis del tribunal. Jennie K. Lincoln, analista para América Latina del Centro Carter y líder de la delegación que fue a Venezuela, dijo en entrevista telefónica con The Associated Press que “no es una evaluación independiente”.
El Centro Carter aseguró anteriormente que no puede verificar los resultados de las cuestionadas elecciones de Venezuela y señaló la “ausencia de transparencia” del organismo electoral en la difusión de los resultados.
Según el Consejo Nacional Electoral de Venezuela, Maduro obtuvo 6,4 millones de votos y González 5,3 millones, aunque hasta el momento no ha hecho públicas las actas del escrutinio pese a las exigencias de la comunidad internacional. Mientras que la oposición afirma haber recopilado el 83% de las actas que señalan que su candidato alcanzó 7,3 millones de votos y Maduro 3,3 millones.
Rodríguez dejó constancia que, de los 10 candidatos convocados a la instancia judicial, y otros 38 representantes políticos, el postulante de la oposición, González Urrutia, no acudió al llamado por lo que “no cumplió con la orden de citación desacatando con su inacción el mandato de ésta”. No se refirió a las posibles consecuencias de ello.
La titular del Tribunal Supremo agregó que González Urrutia no consignó las actas de escrutinio, listado de testigos y material alguno, y que si bien los representantes de los tres partidos que lo postularon atendieron la cita del Tribunal, tampoco aportaron material electoral alguno que pudiera ser evaluado como prueba de sus denuncias de irregularidades en los resultados de los comicios.
“No les quepa la menor duda que impartiremos justicia”, atendiendo a la Constitución y las leyes vigentes, dijo la magistrada.
Maduro compareció la víspera ante ese tribunal y dijo que respondió el interrogatorio que se le hizo “de manera legal”.
María Corina Machado, líder de la oposición, aseguró el sábado en su red social X que “nosotros ganamos, todos lo saben y tenemos las actas para demostrarlo”.
La coalición opositora ha expresado también su desconfianza en la acción del Tribunal Supremo al que considera cercano al régimen.
Venezuela quedó sumida en una crisis postelectoral tras las elecciones presidenciales que se reflejó en protestas callejeras. Las fuerzas del orden del país sudamericano han detenidos a miles de ciudadanos a los que la Fiscalía acusa de propiciar actos violentos y “terroristas”.
La comunidad internacional y organismos de defensa de los derechos humanos han condenado y solicitado la libertad de los detenidos. El Alto Comisionado de las Naciones Unidas pidió la víspera, a través de su portavoz, Liz Throssell, la liberación de los apresados “arbitrariamente de inmediato”, y reitero el derecho de todas las personas a protestar pacíficamente y expresar su pensamiento “libremente y sin miedo”.
El canciller colombiano, Luis Murillo, afirmó el sábado en declaraciones a la radio W Radio, que los presidentes de Colombia, Gustavo Petro, de Brasil, Luiz Inacio Lula Da Silva, y de México, Manuel López Obrador, con su par venezolano, Nicolás Maduro, mantendrán la próxima semana una reunión virtual, como parte de una gestión diplomática para superar la crisis.
Murillo precisó que se trata de una primera conversación y que, de aceptarse una “mediación”, se tendrá que dialogar con todos los actores. La posición del grupo que realiza la “gestión diplomática, dijo, es “que se disipe cualquier duda, que se avance en poder tener los niveles de garantías y credibilidad en este proceso”.