El escenario para la final del Baloncesto Superior Nacional (BSN) está listo, luego de una temporada que ha estado llena de sorpresas y remontadas inesperadas por parte de franquicias a las cuales los pronósticos no las tenían como favoritas para llegar a conseguir el campeonato del 2024.
Los Criollos de Caguas y los Osos de Manatí son los equipos que van al baile final del baloncesto local. Ambas franquicias están haciendo su regreso al BSN, y es la primera vez que se enfrentan por el campeonato. En el caso de Manatí, estos van a su primera final en la historia del BSN, mientras que los Criollos de Caguas van a su primera final desde que ganaron el campeonato en 2006, cuando vencieron a los Cangrejeros de Santurce en el Coliseo de Puerto Rico José Miguel Agrelot.
El camino para ambos equipos de la sección B fue complicado. En primer lugar, los Osos de Manatí quedaron en la cuarta posición con récord de 18-16, tras lograr una racha de cinco victorias al hilo al final de la temporada regular. Sin embargo, cuando comenzó la temporada, en abril, tuvieron altas y bajas. Los Osos ganaron sus primeros dos partidos, pero luego cayeron en una racha de seis derrotas consecutivas. Posteriormente, la llegada de sus principales figuras le dieron una nueva vida al equipo, que sobrevivió en la parte final de la temporada.
Parte del secreto de este equipo trasladado desde Guayama, cuando eran los Brujos, a finales de 2022 por el exponente urbano Jean Carlos Ozuna, mejor conocido como “Ozuna”, son los diversos jugadores nativos que, en combinación con refuerzos, han creado una plantilla con múltiples características que apoyan a su nivel de juego. El equipo cuenta con Jordan Howard, Ethan Thompson y Chris Ortiz quienes han vestido la camiseta de la selección nacional. Además de Isaac Sosa, Tyler Davis y Jhivaan Jackson. A estos los han reforzado el armador Norris Cole y Cheick Diallo.
Pero esas piezas no son suficientes sin la veteranía y conocimiento del gerente general, Flor Meléndez, quien junto al dirigente Iván Ríos han llevado de la mano al equipo hasta la final. En múltiples ocasiones, Meléndez, legendario dirigente del baloncesto local, ha destacado la libertad y confianza que le ha brindado el apoderado y exponente urbano en el manejo del equipo.
Tras clasificar a la postemporada, los Osos tuvieron que enfrentar a los Capitanes de Arecibo, equipo con el mejor récord de la temporada regular. Los manatieños no se amilanaron ante una de las franquicias más exitosas del baloncesto local y lucharon hasta el final para eliminarlos en siete juegos. La sorpresa de los Osos no se quedó ahí, ya que también eliminaron a los campeones defensores Gigantes de Carolina 4-0 en la semifinal.
Por su parte, los Criollos de Caguas, tuvieron un gran comienzo de temporada. Tras perder su primer partido ante los Atléticos en San Germán, lograron una racha de siete victorias al hilo. Caguas estuvo una parte de la temporada batallando el primer lugar de la sección B con los Mets de Guaynabo, pero en la recta final cayeron al tercer lugar. Esto no ha sido obstáculo para los Criollos, quienes se encargaron de ganar en siete partidos ante los Santeros de Aguada, quienes clasificaron en segundo lugar de la sección A. Posteriormente, sacaron del camino a los Leones de Ponce en seis juegos (4-2).
Los Criollos regresaron esta temporada tras quince años de ausencia en el BSN y bajo nueva administración, que trasladó al equipo desde Humacao, donde eran los Grises. El equipo ha sido capitaneado por el dirigente Wilhelmus Caanen. Además, fue liderado por Travis Trice, ganador del premio al Jugador Más Valioso del BSN; Louis King, y Akil Mitchel.
Luego de haber recorrido todo este camino, la temporada del BSN, que comenzó en abril, tiene en los Osos de Manatí y Criollos de Caguas a sus dos finalistas, equipos que quedaron en las posiciones 3 y 4 de la sección B.
La serie final dará comienzo el 17 de agosto y, de extenderse a siete juegos, terminaría el 30 de agosto.
Los Criollos tienen ventaja de cancha local por culminar la temporada con mejor récord que los Osos.
