Cerca de 100 agentes de la Policía de Puerto Rico amanecieron el jueves en el municipio de Vieques, en un operativo que produjo el arresto de cinco personas, mediante el diligenciamiento de cinco órdenes de allanamiento.
Los arrestados son miembros de la organización criminal que lideraba Wilberto “Kiko” Cruz Ayala quien fue asesinado en mayo pasado. A este se le vincula con múltiples asesinatos ocurridos en la isla municipio.
En el operativo, que está a cargo de la Superintendencia de Operaciones Especiales (SAOE) de la Policía, se ha ocupado al momento, tres armas ilegales, municiones, sustancias controladas, chalecos antibalas y dinero en efectivo entre otros.
El comisionado de la Policía, Antonio López Figueroa, explicó que esta operación es parte de un plan desarrollado para atender una serie de incidentes violentos que se han producido en Vieques y que responden a la guerra de poder entre organizaciones de narcotráfico que operan en ese sector. Este indicó además, que los allanamientos son parte de una serie de investigaciones activas que lleva a cabo la policía en la isla.
Según el director de la Superintendencia de Operaciones Especiales, el coronel Carlos Cruz Burgos, entre los arrestados hay cuatro integrantes de la organización y la madre de uno de los líderes y sospechoso de varios asesinatos, que ha cobrado la vida de sicarios y personas inocentes.
Cruz Burgos agregó que fue necesario activar el protocolo de menores por la presencia de una infante de dos años y un adolescente en las residencias allanadas con material ilegal, por lo que se llamó al Departamento de la Familia.
Según investigaciones que conduce el CIC de Fajardo, Cruz Ayala, de 41 años, fue asesinado el pasado 15 de mayo, mientras lavaba un vehículo todoterreno (four track) en el barrio Tortuguero. Este fue el primer asesinato reportado en la isla este año. Su cuerpo recibió aproximadamente 30 heridas de bala.
La organización, que fuera liderada por Cruz Ayala hasta el momento de su asesinato en mayo pasado, es investigada, además, por la muerte del bombero jubilado Luis Ortiz Ventura, quién fue alcanzado por las balas en su hogar, tras un tiroteo entre estos y un grupo de adversarios. De igual modo, se les vincula con el asesinato del sobrino de Jorge “Champú” Acevedo Martínez, uno de los integrantes clave de la organización conocida como el Cartel de Vieques, acusada a nivel federal en 2014. Tanto el bombero como el sobrino de Champú se consideran víctimas inocentes de la guerra entre narcos en el municipio.
Como parte del Plan, que persigue restablecer la paz en las comunidades de Vieques, participaron agentes de las divisiones de Drogas, FURA, Unidad Canina y Servicios Técnicos.
