El fabricante del popular juego de mesa “Cards Against Humanity” acusó a SpaceX, empresa de Elon Musk, de invasión de propiedad privada y causar daños en un lote vacío que pertenece a la compañía en Texas.
En una demanda interpuesta esta semana en un tribunal de Texas, Cards Against Humanity asegura que SpaceX prácticamente ha tratado a la propiedad de la compañía —ubicada en el condado de Cameron— como si fuera suya, durante al menos los últimos seis meses.
Según la denuncia, SpaceX, que ha adquirido previamente otros lotes cercanos a la propiedad, ha colocado materiales de construcción, como grava y otros escombros en el terreno sin haber solicitado permiso para hacerlo.
Por su parte, SpaceX no respondió de inmediato a un mensaje en busca de comentarios.
Cards Against Humanity, con sede en Chicago, había adquirido el terreno en 2017 como parte de lo que aseguró se trataba de una maniobra para oponerse a las labores del entonces presidente Donald Trump de construir un muro fronterizo.
Según la empresa, 150,000 personas contribuyeron con 15 dólares cada una para llevar a cabo esta labor.
Cards Against Humanity afirma que a lo largo de los años han mantenido el terreno en su estado natural. También asegura que contiene un letrero que indica que está prohibida la entrada para advertir que se trata de una propiedad privada.
La empresa busca una compensación de 15 millones de dólares.
