La nueva entrega del universo El Señor de los Anillos: The War of the Rohirrim ha llegado a los cines y, aunque personajes como Saruman hacen acto de presencia, Gandalf brilla por su ausencia.
Sin embargo, el director de la película, Kenji Kamiyama, ha explicado las razones detrás de esta decisión creativa y cómo el nombre del icónico mago conecta con el universo original de la trilogía.
Ambientada 180 años antes de los eventos de El Señor de los Anillos, The War of the Rohirrim narra una historia épica dentro de la Tercera Edad.
La trama sigue a Hera, la hija de Helm Hammerhand, el noveno rey de Rohan, cuyo enfrentamiento mortal con un señor de los Dunlendings provoca una guerra encabezada por Wulf, el hijo del difunto. Esta batalla será fundamental para definir la línea de reyes de Rohan y el legado de Helm’s Deep.
Aunque Sauron y el Anillo Único no son parte de esta historia, la película presenta conexiones con la trilogía original, como la aparición de Saruman, cuya voz es recreada a partir de grabaciones del fallecido Christopher Lee. Sin embargo, Gandalf solo es mencionado al final de la cinta.
Referencia a Gandalf
Hacia el desenlace de The War of the Rohirrim, Hera abandona Edoras para buscar a Gandalf, quien quiere discutir con ella lo que vio en Helm’s Deep: los orcos recolectando anillos con destino a Mordor. Aunque el mago no aparece físicamente, su nombre tiene un peso narrativo importante.
En una entrevista con Dexerto, el director Kenji Kamiyama reveló que no hubo planes concretos para incluir una aparición de Gandalf o un cameo de Ian McKellen. “En esta etapa, no tenemos planes de hacerlo aparecer en futuras películas”, explicó.
Kamiyama subrayó que la mención de Gandalf no fue casualidad: “Incluso el simple hecho de mencionar su nombre y su carta… queríamos mostrar cómo este mundo está conectado con la trilogía. Por eso también incluimos a Saruman, para que el público sintiera esa conexión”.
Philippa Boyens, guionista de la trilogía original y parte del equipo de The War of the Rohirrim, coincidió en la importancia de conectar la nueva película con las películas live-action de Peter Jackson.
“Esa referencia tenía el propósito de acercar esta película a los bordes del universo de El Señor de los Anillos y hacer que se sintiera como parte de él”, explicó Boyens.
Boyens también destacó que la inclusión de Gandalf como figura lejana sirvió para justificar el destino de Hera al final de la historia. “Necesitábamos que Hera saliera de escena… y él parecía la persona perfecta para enviarle ese mensaje”.
