Cuando la productora de cine Annabelle Mullen-Pacheco decide plantarse por primera vez detrás de cámaras para dirigir, pudimos anticipar que sería un proyecto muy cercano, pero jamás imaginamos cuan íntimo sería.
En su opera prima @mor, que estrena hoy en cines, la cineasta nos presta un pedazo de su vida. Esta propuesta cuenta la historia de una productora de cine que luego de enfrentar un diagnóstico de células pre-cancerígenas, decide dejarlo todo y mudarse por un tiempo a Galicia, España para reencontrarse y recargar energías, jamás imaginando que encontraría más de lo que quería. Marisé Álvarez, quien por más de una década nos ha hecho reír a carcajadas como parte del colectivo Teatro Breve, interpreta a Yuliana, una mujer vulnerable, pero arrojada y determinada, que agobiada del rumbo que lleva su vida, decide explorar nuevas oportunidades, pero bajo sus propios términos. Y es precisamente esa jornada emocional, lo que hace de esta producción una especial.
La cinta incorpora efectivamente el humor cuando la protagonista comienza a utilizar una aplicación de citas que la va a llevar a divertidos encuentros que pondrá de manifiesto un extenso perfil de diversas personalidades, que la empujarán a conectar con ella y a amarse más. Mullen-Pacheco, que no está ajena a explorar temáticas que profundizan en la psiquis de la mujer (Pies En La Arena y Erase Una Vez En El Caribe), decidió colocarse frente y detrás de cámaras junto a un extraordinario grupo de mujeres, desde las guionistas Maritere Vé-lez y Amelia del Mar Hernández, a quienes le entregó parte de su historia, hasta Álvarez, que se enamoró del texto cuando se le presentó, al punto de firmar también como productora ejecutiva.
La recién estrenada directora demuestra control absoluto del medio con esta refrescante y reflexiva propuesta, que nos deja queriendo saber cuál será su próxima aventura. Visualmente exquisita, especialmente las tomas de exterior en España, que convierten a ese país en otro personaje, con una cautivante narrativa que te agarra desde el primer plano, y que respeta las diferencias culturales, @mor demuestra que el cine puertorriqueño continua por buen camino y en buenas manos.
Por su parte, Álvarez cautiva y conmueve con fuerza avasalladora, adueñándose de la pantalla con una actuación restringida, demostrando sus quilates histriónicos en los momentos más vulnerables y sobresaliendo en aquellos que exigen de su talento para la comedia. Su magnética actuación es complementada por compañeros de escena con personajes hermosamente construidos, cuyos interpretes hacen suyos, especialmente el personaje de su madre en mano de la siempre genial Marian Pabón, quien nos regala una abnegada madre, amorosa y preocupada por su hija. La química entre ambas es uno de los grandes aciertos emocionales de esta película, aun cuando sus interacciones se limitan a videollamadas.
Por otro lado, Las Pipas, el trío de amigas y confidentes de la protagonista, interpretadas por Eyra Agüero, Tiffany Díaz y María Coral Otero, complementan sus personalidades para crear una tribu de apoyo a Yuliana. Las conversaciones telefónicas, mensajes de texto y videollamadas aportan inmensamente a la travesía de Yuli y resultan en secuencias sumamente divertidas y reveladoras. Y no podemos ignorar los personajes masculinos, especialmente aquellos tres que van a impactar la vida de Yuli y de manera sutil e inteligente, con jornadas emocionales genuinas, y que en manos de los actores españoles Christian Escuredo, Anselmo Menéndez Arias y Xulio Abonjo, registran de forma auténtica gracias al sólido texto, que evita estereotiparlos, en este dramedy que también cuenta con las actuaciones de Sunshine Logroño, José Eugenio Hernández y la participación especial de Fele Martínez.
La cinta, que fue originalmente creada como una serie, cuenta con una factura técnica muy cuidada, desde la incorporación de modernos elementos visuales, una hermosa fotografía, hasta la acertada banda sonora. De la mano de este exquisito grupo de talentosas artistas, @mor se une a la reciente comedia Parto y próximamente, al primer largometraje de Roselyn Sánchez, Diario de Mujer y Café, en esta nueva ola de cineastas con un certero tratamiento de historias cercanas desde el lente femenino, que nos deja queriendo conocer más de estas poderosas voces, particularmente de Mullen-Pacheco y su corilla.